COSTALEROS DE ANDALUCÍA
Esta entrada se la dedico a mi padre.
El origen del costalero viene desde mucho más atrás. Los primeros datos que se obtuvieron, aparecieron en unos grabados en el archivo de la Catedral de Sevilla. Están fechados en 1647 cuanto portaban sobre sus hombros , las andas del Corpus Christi de Sevilla, y sería en 1686 cuando ya lo portaran a costal.
Los costaleros son hermanos de las cofradías, que no cobran por salir, por llevar en procesión a su Cristo o a su Virgen, aunque en algunos hermandades si lo hacen.
La cuadrilla de costaleros está mandada por el capataz y éste es el responsable de su cuadrilla. El capataz camina ante el paso, dirige la conducción de éste, que los costaleros ejecutan a ciegas bajo los faldones. En las esquinas van los contraguías y van transmitiendo las órdenes del capataz para que toda la cuadrilla de costaleros las pueda oír.
Una labor del capataz es la de la igualar, consiste en distribuir a los costaleros según su altura. Una mala igualada ocasiona una distribución no uniforme de peso y es causa de alteraciones en la forma de caminar el paso.
Los costaleros que ocupan los puestos laterales de la trabajadera se llaman "costeros", y los que se sitúan en el centro son los "corrientes" y los situados entre ambos son los "fijadores".
Son entre 30 y 50 costaleros los que van bajo un paso, siempre dependiendo del tamaño, y soportan sobre su cuello y su hombros entre 40 y 60 kilos.
La labor de estos hombres es anónima, y sus rostros quedan ocultos tras los faldones del paso.
El nombre les viene del costal, que es parte de la "ropa", es la prenda que va compuesta de un trozo de arpillera o costal, doblada alrededor de una morcilla cilíndrica de tela, cubre por debajo de la nuca a las primeras vértebras y espalda, para amortiguar el peso y evitar que la trabajadera resbale.
El costal va forrado de un lienzo fuerte pero suave para que la piel no se roce con la arpillera.
Un personaje típico es el "AGUAO" (aguador). Antiguamente, con un cántaro al hombro, llevaba el agua o el vino que ofrecía a los costaleros en un latilla. Hoy suele llevar bidones de plástico, y ¡como no! los familiares que los acompañan hasta el final de la procesión.
Muchos han sido los autores y las personas relacionadas con el mundo de la Semana Santa que no han dudado en definir al costalero como el cirineo que alivia el dolor de Jesús y de su Madre en las calles de nuestra Andalucía. "Algo que se hace con tantas ganas e ilusión es imposible que haga daño", "ser costalero significa poseer el honor y el orgullo de poder llevar sobre los hombros al propio Dios de la vida y a nuestra Madre del cielo".
Se han vertido muchas opiniones que, desde antaño, ha menospreciado la labor de esos hombres que dieron y dan parte de su vida por algo que sólo conoce quien un día pudo calzarse un costal o una faja y sintió."
Sólo hay que ver el sacrificio que hacen, cuando salen del paso con expresión de cansancio, y esos hombros en carne viva, pero al día siguiente van a ver las procesiones de las demás hermandades, en fin "eso es fe". Solo escuchar como arrastran los pies, como levantan a su Cristo o su Virgen, se arrodillan, "eso es pasión".
Sólo hay que ver el sacrificio que hacen, cuando salen del paso con expresión de cansancio, y esos hombros en carne viva, pero al día siguiente van a ver las procesiones de las demás hermandades, en fin "eso es fe". Solo escuchar como arrastran los pies, como levantan a su Cristo o su Virgen, se arrodillan, "eso es pasión".